La riqueza mineral de su subsuelo ha favorecido la superposición de distintas civilizaciones en El Gastor. Los dólmenes, especialmente el del Charcón -también conocido como tumba del Gigante-, ilustran la existencia de un importante poblamiento durante el neolítico. Tras la cultura tartésica hay que recordar el paso de fenicios, griegos y cartagineses. La presencia de los musulmanes fue fugaz y a principios del siglo XVI algunos vecinos de Zahara fundaron esta población en la falda del peñón de Langarín, para conseguir un mejor aprovechamiento agropecuario del territorio (Juan Alonso de la Sierra, Lorenzo Alonso de la Serra, Ana Aranda Bernal, Ana Gómez Díaz-Franzón, Fernando Pérez Mulet, y Fernando Quiles García. Guía artística de Cádiz y su provincia. Tomo II. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2005).
El Gastor, en cuyo término, rico en minerales y por el que han pasado tartesios, fenicios, griegos, cartagineses, romanos y musulmanes, se encuentran dólmenes prehistóricos, como la tumba del Gigante.
El caserío, muy tranquilo, invita a un paseo sosegado, a través del cual se descubren abundantes rincones con mucho encanto, como el Callejón, en el que la planta alta de las casas cubre la calle.
La iglesia de San José se localiza en la plaza de la Constitución, llamativo templo de una sola nave levantado con las aportaciones de los vecinos. La espadaña, de dos cuerpos, confiere personalidad a la fachada.
En la calle Alta está el Museo José María el Tempranillo, de artes y costumbres populares, ubicado en una casa tradicional gastoreña en la que vivió la novia del famoso bandolero (Rafael Arjona, y Lola Wals. Guía Total, Cádiz, Costa de la Luz. Editorial Anaya Touring. Madrid, 2008).
Iglesia de San José
Entre 1734 y 1737 se construyó a expensas del propio vecindario una primera iglesia, pequeña pero suficiente para la reducida población. A partir de 1790 sufre una importante reforma para corregir el estado ruinoso de la fábrica y ampliar su tamaño. Las obras fueron dirigidas por Antonio María de Figueroa y dieron lugar a un edificio de una sola y monumental nave, cubierta por bóveda de cañón y capillas abiertas entre los contrafuertes. A los pies, sobre el acceso principal, se sitúa un espacioso coro. La cornisa, las enjutas y los perfiles de los arcos están decorados con molduras. Al exterior posee una fachada rematada por espadaña de dos cuerpos y triple piñón.
De su mermado conjunto artístico, afectado como la mayoría de los pueblos de la Sierra por la destrucción de imágenes en 1936, podemos destacar la escultura dieciochesca de candelero de la patrona de la localidad, la Virgen del Rosario, así como un pequeño Niño Jesús tallado en el mismo siglo y que formaba conjunto con un San Antonio desaparecido. En una urna realizada hace pocos años se exhibe un antiguo crucificado, interesante obra del siglo XVI realizada en pasta de madera, al que se han modificado los brazos para convertirlo en yacente (Juan Alonso de la Sierra, Lorenzo Alonso de la Serra, Ana Aranda Bernal, Ana Gómez Díaz-Franzón, Fernando Pérez Mulet, y Fernando Quiles García. Guía artística de Cádiz y su provincia. Tomo II. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2005).
A la iglesia se accede por la puerta principal, tras subir una escalera de un tramo: tras pasar, nos encontramos con una nave central rectangular con bóveda de cañón y una serie de altares laterales que albergan a diferentes imágenes: a la derecha, la Virgen del Carmen, Inmaculada, San Antonio, Virgen del Rosario; a la izquierda: Santo Entierro, un niño Jesús, Inmaculada, Virgen de Dolores, S. Juan Evangelista y Ntro. Padre Jesús Nazareno. Al final de la nave se sitúa el altar, bajo una cúpula sobre pechinas, y éste es de madera con hornacina central y columnas laterales. A la derecha del altar se sitúa la sacristía, a la que se accede a través de una puerta de madera de doble hoja; y a la izquierda del altar existe una puerta por la que se llega al despacho y a una de las dos salidas laterales, en este caso la del despacho del párroco. La cubierta es a dos aguas en la nave central, y a una en las laterales, en la cúpula es a seis aguas, con dos cubiertas laterales (una a la derecha a una agua y otra a la derecha a una agua) y finalmente otra en la parte trasera de la cúpula a un agua. Los muros son de un grosor aproximado de 50 a 95/100 cm, dependiendo de las zonas y fabricados con piedra, arena y cal, aunque en algunas zonas se han picado. Las cubiertas son de teja. Todo el cuerpo central de la Iglesia lo compone una bóveda de cañón. Suelos de mármol. En el lateral derecho hay cuatro vanos: puerta lateral de acceso a la Iglesia de dos hojas y puerta de acceso al despacho del Párroco, de dos hoja; una ventana que da al despacho del Párroco, y otra a un cuartito situado arriba del despacho. En la parte frontal, se encuentra la puerta principal de acceso de dos hojas y una claraboya que ilumina parte de la Iglesia. Las paredes de la Iglesia están encaladas, al igual que la fachada exterior. Como ornamentación destacar la pintura de las molduras interiores que coronan los pilares que llegan hasta la bóveda de cañón en Amarillo. En la parte derecha de la nave, desde la puerta hacia el Altar: capilla con hornacina con una Virgencita; capilla- hornacina con una Virgen del Carmen; altar en mampostería adosado a la pared con una Inmaculada; Capilla con hornacina con un San Antonio y hornacina lateral, más pequeña con un Niño Jesús; el altar de la Virgen del Rosario, patrona de la localidad con una alfombra, flores con sus foreros y ofrendas. En la parte izquierda de la nave, desde la puerta hacia el Altar: pila bautismal de principios de siglo, imagen del Santo Entierro y cuadro de ánimas; puerta lateral de acceso y hornacina lateral, más pequeña con un niño Jesús. Altar de la Inmaculada, adosado a pared en madera policromada marrón claro y marrón dorado. Altar en mampostería con Virgen de Dolores, S. Juan Evangelista y Ntro. Padre Jesús Nazareno. Además del interés histórico del edificio, data del siglo XVIII, de estilo neoclásico, este inmueble alberga a la Patrona de El Gastor: La Virgen del Rosario, así como a las Hermandades que existen en la localidad (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Dolmen grande y en buen estado. Se hallaron tallas de sílex a su alrededor. Se halla situado en la cima del monte Tagarín y está formado por bloques ciclópeos de unos 18 metros de extensión, 1-2 metros de ancho por 3-4 metros de alto (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Otros lugares de interés
El conjunto urbano conserva algunos rincones de interés, como el Callejón, con varios tramos cubiertos por viviendas.
El Museo del Tempranillo permite conocer una casa tradicional pues conserva su primitiva distribución. En planta baja arranca desde la puerta la corriente o pasillo de cantos rodados, a cuyos lados se distribuyen el dormitorio y una sala, para acabar en el patio, donde se abren la cocina y la cuadra. La planta superior no era habitable, sino que se destina a soberado para almacenamiento de los productos agrícolas y ganaderos, formando hoy parte del itinerario expositivo de los útiles del campo y las labores artesanales (Juan Alonso de la Sierra, Lorenzo Alonso de la Serra, Ana Aranda Bernal, Ana Gómez Díaz-Franzón, Fernando Pérez Mulet, y Fernando Quiles García. Guía artística de Cádiz y su provincia. Tomo II. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2005). 
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