Hoy, 28 de mayo, es el Día Internacional del Ceramista, de ahí que hoy sea el mejor día para ExplicArte la calle Alfarería, de Sevilla, dando un paseo por ella.
La calle Alfarería es, en el Callejero Sevillano, una calle que se encuentra en los Barrios de Triana Casco Antiguo, y Triana Oeste, en el Distrito Triana; y va de la calle San Jacinto, a la avenida Ronda de Triana.
La calle, desde el punto de vista urbanístico, y como definición, aparece perfectamente delimitada en la población histórica y en los sectores urbanos donde predomina la edificación compacta o en manzana, y constituye el espacio libre, de tránsito, cuya linealidad queda marcada por las fachadas de las edificaciones colindantes entre si. En cambio, en los sectores de periferia donde predomina la edificación abierta, constituida por bloques exentos, la calle, como ámbito lineal de relación, se pierde, y el espacio jurídicamente público y el de carácter privado se confunden en términos físicos y planimétricos. En las calles el sistema es numerar con los pares una acera y con los impares la opuesta.
También hay una reglamentación establecida para el origen de esta numeración en cada vía, y es que se comienza a partir del extremo más próximo a la calle José Gestoso, que se consideraba, incorrectamente el centro geográfico de Sevilla, cuando este sistema se impuso. En la periferia unas veces se olvida esta norma y otras es difícil de establecer.
La vía, en este caso una calle, está dedicada a la industria de la Alfarería.
Es el resultado de cuatro vías anteriores: Barrionuevo, entre las actuales Antillano Campos y Procurador, conocida desde el siglo XV con este nombre debido al carácter nuevo del barrio que allí se iba conformando; Palomar, entre las actuales San Jorge y Antillano Campos, desde el siglo XVII por la existencia en dicha vía del corral del Palomar; Vinagre, entre las actuales Procurador y Castilla, desde el siglo XVI por el asentamiento en ella de vendedores de esta mercancía, y Tejares, existente desde 1431 entre Magallanes y Castilla, por la presencia en ella de industrias de este tipo. En 1859 se unifican las tres primeras bajo el nombre de Alfarería por asentarse en ella gran cantidad de artesanos de esta actividad. El primer tramo que se configura es el perteneciente a Barrionuevo; el crecimiento de este nuevo asentamiento urbano da lugar a Vinagre; ya en el siglo XVII la construcción de manzanas entre San Jorge y Matamoros (Antillano Campos) da lugar a Palomar y en l910 se le añade el tramo correspondiente a Tejares. Su trazado siempre le dio el carácter de eje longitudinal del barrio, que transcurre paralelo al río, junto con Castilla y Pagés del Corro.
Actualmente es una vía estrecha y larga, adoquinada y con acerado de losetas de cemento, articulada en cuatro tramos: el primero de San Jacinto a Antillano Campos, corto y ligeramente curvo; el segundo de Antillano Campos a Clara de Jesús Montero, el más largo y prácticamente paralelo al río; el tercero paralelo a la calle Castilla hasta llegar al núm. 139 en que bruscamente forma ángulo recto dando lugar al cuarto tramo. A ella confluyen por la derecha, callejón Requena, pasaje Capataces Ariza, dos barreduelas sin nombre, Magallanes, Alvarado y Pinzón, y por la izquierda Covadonga, Nuestro Padre Jesús Nazareno, Clara de Jesús Montero, Tejares, y Manuel Vigil-Escalera Díaz, cruzándola Antillano Campos y Procurador. El alumbrado se realiza por farolas sobre brazos de fundición adosadas a las fachadas en el primero y segundo tramos, y por farolas de báculo en el tercero y cuarto. Predominan las viviendas unifamiliares de dos plantas en la primera parte de la vía, cuya calidad y estado de conservación disminuye a medida que se aleja de San Jacinto. En el comienzo del tercer tramo existen edificios de viviendas de seis y ocho plantas, alternando con naves comerciales y otras abandonadas. Morales Padrón la llama "museo del corral de vecinos" por encontrarse en ella este tipo de edificaciones en sus múltiples variedades, desde su versión genuina a la moderna de un patio central con domicilios unifamiliares. Conserva asimismo edificaciones de tipo regionalista entre las que cabe destacar el núm. 21, de Juan Talavera (1924). Su primitiva funcionalidad fue como centro artesano de alfareros; aún existen en ella numerosos hornos y lugares de venta de estos productos. Actualmente este carácter artesano ha desaparecido y el comercio se ha desplazado hacia Castilla. Su cine de verano se cerró hace años y hoy es una calle marginal que puede convertirse en centro comercial en fechas próximas, con el traslado del mercado a los locales del antiguo cine Alfarería [María del Carmen Medina, en Diccionario histórico de las calles de Sevilla, 1993].
Alfarería, 32. Corral en cuya fachada se conserva un azulejo que recuerda su construcción en 1825.
Alfarería, 52. En este número hay que destacar la cancela y dos cuadros de azulejos con temas camperos [Francisco Collantes de Terán Delorme y Luis Gómez Estern, Arquitectura Civil Sevillana, Excmo. Ayuntamiento de Sevilla, 1984].
Si quieres, por Amor al Arte, déjame ExplicArte Sevilla, déjame ExplicArte la calle Alfarería, de Sevilla, dando un paseo por ella. Sólo tienes que contactar con nosotros en Contacto, y a disfrutar de la ciudad.
Más sobre el Callejero de Sevilla, en ExplicArte Sevilla.
La calle Alfarería, al detalle:
Edificio Alfarería, 8.
Azulejo conmemorativo a Manolo Bejarano.
Corral de vecinos, en Alfarería, 21.
Retablo cerámico de la Divina Pastora
Edificio Cerámica Montalván, 13.
Azulejos cerámicos en Fábrica Antonio Campos
Corral de vecinos "Cerca Hermosa", en Alfarería, 32.
Azulejo conmemorativo a Gracia Villegas Gómez
Edificio Antonio Japón, en Alfarería 31-33.
Azulejos cerámicos de Vía-Crucis y taller de Antonio Joaquín Dubé de Luque
No hay comentarios:
Publicar un comentario