Por Amor al Arte, déjame ExplicArte la provincia de Huelva, déjame ExplicArte los principales monumentos (Fuente de los Doce Caños; Humilladero de Nuestro Señor de la Verónica; Iglesia del Espíritu Santo; y Plaza de Toros) de la localidad de Fuenteheridos, en la provincia de Huelva.
Ubicación
Fuenteheridos se encuentra situado en pleno corazón del parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche y su casco urbano está declarado "Conjunto Histórico-Artístico" por su alto valor arquitectónico.
Este municipio ocupa aproximadamente 1.092 hectáreas y tiene una población de 700 habitantes, los cuales son conocidos con el gentilicio de "paperos", ya que fue aquí donde la patata encontró el lugar idóneo para su siembra cuando fue traída desde América.
Sus límites fronterizos son: al Norte y al Oeste con Galaroza, al Este con Los Marines, al Oeste y al Sur con el Castaño del Robledo.
Es uno de los pueblos con mayor altitud de la Sierra con sus 717 m. sobre el nivel del mar. El término municipal está repleto de castaños dándole vida natural durante todo el año.
Reseña histórica breve
Los orígenes del pueblo datan de la época musulmana. No está clara la procedencia de su nombre, hasta que a partir de 1984, Rodolfo Recio comenzó sus investigaciones. El historiador llega a la conclusión de que el lenguaje leonés fue traído por sus antepasados medievales, y que Ferido- usado en plural - significó primitivamente en El Bierzo "turno de riego". Por tal motivo figura en la leyenda "Fonte de los Feridos".
Patrimonio cultural y artístico
PLAZA EL COSO: Se encuentra en el centro del pueblo y está presidida por una impresionante y maciza "cruz de mármol" realizada en 1792 a partir de los afamados materiales de las canteras de Fuenteheridos.
LA ERA DE LA CARRERA: En la parte superior del pueblo, se encuentra la Era de la Carrera, la cual se utilizaba antiguamente para trillar. Actualmente se ha construido un mirador desde el que se puede contemplar la belleza del pueblo.
IGLESIA PARROQUIAL DEL ESPIRITU SANTO: De estilo neoclásico presidida por una esbelta torre del siglo XVIII. La actual planta es del arquitecto Pedro de Silva que la reconstruye tras el terremoto de Lisboa. La joya más valiosa para los habitantes es la imagen de la Patrona, la Virgen de la Fuente de estilo barroco y que data del s. XVIII.
LA VERÓNICA: Se trata de uno de los escasos Humilladeros de Andalucía y data del s. XVIII. Al conocido popularmente como "Cristo de la Verónica", lo podemos observar en un "camino real" que es al mismo tiempo el camino del cementerio, destacando su enclave por estar en un paraje de gran belleza natural.
PÚLPITO DEL ESPÍRITU SANTO: Según algunos historiadores, se trata de un punto estratégico que unía la calzada romana de Emérita Augusta (Mérida) con Itálica. Pero fue utilizado para dar misa a aquellos que no podían entrar en la Iglesia.
FUENTE DE LOS DOCE CAÑOS: Fuenteheridos alberga un importante acuífero al abrigo de rocas carbonatadas, calizas y dolomías del Cámbrico, con caudales subterráneos que históricamente se han aprovechado. Este acuífero alivia sus aguas a través de varias fuentes y manantiales. Entre los mismos destaca la Fuente de los Doce Caños, que recoge las aguas subterráneas del puerto de los Ángeles y el Cerro de los Conejales, situándose en el mismo centro urbano, en la plaza del Coso, de ella manan diariamente dos millones de litros de agua, estas, son aprovechadas para el riego de huertas y abastecimiento de la localidad.
PLAZA DE TOROS: Su construcción data de 1885, a partir de una apuesta (construir la plaza antes de un año) entre un vecino de la localidad llamado Tinoco y el Alcalde del Castaño del Robledo, pueblo vecino y con el que existía cierta rivalidad. Destacan sus muros de mampostería, que sujetaron los arcos de medio punto que formaban la presidencia en la grada ya destruida.
ANTIGUO BARRANCO DE LA FUENTE: Junto al paseo de Arias Montano, podemos contemplar el nacimiento de las "lievas", restauradas y embellecidas a través de cascadas y lagos alrededor de los cuales ha sido acondicionado un lugar de paseo y descanso. Las lievas son las acequias de riego que distribuyen el agua de la Fuente de los Doce Caños, por los tres "pagos" (camino de agua) de la localidad.
Fiestas y tradiciones
DIA DE ANDALUCIA : El 28 de Febrero los representantes del Ayuntamiento invitan a todos sus vecinos a celebrar el día de Andalucía con un aperitivo en la plaza del pueblo. Ameniza este acto una banda de música.
SEMANA SANTA: En la Semana de Pasión se hacen los correspondientes actos religiosos. El Viernes Santo podemos ver en procesión a la Virgen de los Dolores y al Señor de la Columna recorriendo las calles de esta localidad.
QUEMA DE LOS JUDAS: Se celebra el Sábado Santo, alrededor de la media noche. Esta fiesta comienza ese mismo día por la tarde, en la Era de la Carrera, con la elaboración de los muñecos de trapo, acto al que acuden muchas personas y que en la última celebración, ha dado lugar a un concurso en el cual se premia al muñeco más original. Antiguamente las personas quemaban los Judas y ahí se terminaba la fiesta, pero en la actualidad, los jóvenes aparte de quemar los judas esperan a que se caigan los zapatos para comenzar una verdadera batalla campal entre todos los asistentes por las calles de la localidad. Hoy en día es la fiesta con más apogeo del pueblo.
DÍA DEL BOLLO: Se celebra el Domingo de Resurrección. Ese día se reúnen personas de todas las edades en los campos que rodean la localidad para compartir la comida que han preparado. Es típico la degustación de un "Hornazo" o bollo de pan con un huevo en su interior que recibe el nombre de "Rosca".
FIESTA DEL PATRÓN: El patrón de Fuenteheridos es el Espíritu Santo. Esta fiesta se celebra 7 días antes del Corpus. En ella se celebra una misa y tras ella, una procesión y por la noche un baile popular en plaza del pueblo. El patrón fue traído por los pobladores castellano-leoneses. Durante la fiesta, en la puerta del mayordomo se coloca un chopo que previamente ha sido trasladado por los jóvenes y mayores de la localidad, desde la finca del propietario que haya donado el árbol.
FIESTA DEL CARRO: El Carro tiene su origen en la visita que hacen los jóvenes de Fuenteheridos a la localidad de Navahermosa (aldea de Galaroza), en sus fiestas locales. Los jóvenes de Fuenteheridos se reúnen, el Sábado y adornan con pintadas y papeles de colores un coche viejo, el cual se utiliza para transportar la garrafa de ponche que se beberá durante el recorrido. Dicho coche es empujado hasta la localidad festiva que espera ansiosa su llegada. Allí, en medio de la fiesta, se reúnen todos y levantan en peso el coche varias veces. En la actualidad se trata de una fiesta en auge conocida en toda la Sierra.
FIESTAS DE LA VIRGEN DE LA FUENTE :Se realiza el 15 de Agosto. Es la patrona de Fuenteheridos y en su honor se organizan actos culturales y festivos que suelen durar 4 ó 5 días. El día de la patrona, la Virgen sale en procesión por las calles del pueblo y durante este acto se bendice el agua de la Fuente tan importante para éste.
ROMERÍA DE LA REINA DE LOS ÁNGELES: Esta peregrinación tiene su origen en el s. XIX, celebrándose cada 8 de septiembre y teniendo desde esta época su hermandad de la Reina de los Ángeles con ermita situada en la Peña de Arias Montano. Durante el camino nos encontramos con chiringuitos montados para la ocasión. La noche anterior a la romería hay un bonito espectáculo de fuegos artificiales y es típico, de los vecinos de Fuenteheridos, ir andando hasta allí, para su disfrute.
FIESTA DE LA CASTAÑA: Se realiza en la primera semana de Diciembre, cuando finaliza la recolección del fruto. Antiguamente esta fiesta se celebraba para entregarle la castaña de oro, al vecino del pueblo que hubiese realizado algún acto, en beneficio de esta localidad; para agradecer su colaboración en el desarrollo de Fuenteheridos y para fomentar la iniciativa del resto de los ciudadanos. Sin embargo esta tradición se ha sustituido actualmente, por la subasta de la corona de los Reyes Magos.
Recursos económicos y sociales
Agricultura y turismo rural
Gastronomía
Potaje de Castañas, arroz con Pinateles, caldillo De Matanza, picadillo de Invierno, sopa de setas, torrijas, gallipiernos rebozados (Diputación Provincial de Huelva).
La falta de testimonios arqueológicos hacen difícil calibrar la antigüedad de esta población que, seguramente, se iniciaría con un asentamiento humano junto a la fuente que da nombre al pueblo. Los restos más antiguos en su término municipal son los de origen musulmán que fueron hallados en el yacimiento del Cerro de Castillejos. Tras la Reconquista cristiana, a mediados del siglo XIII, la zona es repoblada por leoneses y se convierte en tierra de realengo. Este primitivo núcleo de población quedó adscrito a la jurisdicción de la ciudad de Sevilla, como aldea de Aracena, alcanzando la categoría de villa en 1716. Posiblemente, la etimología del topónimo Fuenteheridos guarda relación evidente con las voces «fuente» y "feridos", esto es, fuente de los heridos, término éste último con que en siglos pasados se denominaban las grietas de la tierra de las que manaba agua.
La Plaza del Coso, donde se localiza la Fuente de los Doce caños, está centrada por una crucero de mármol erigido en 1792, hoy desplazado de su ubicación original, con una inscripción que alude al monumento corno triunfo de la Santa Cruz y aclara que fue realizado en mayo de 1792 gracias a la devoción de los vecinos (Manuel Jesús Carrasco Terriza, Juan Miguel González Gómez, Alberto Oliver Carlos, Alfonso Pleguezuelo Hernández, y José María Sánchez Sánchez. Guía artística de Huelva y su provincia. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2006).
El casco está situado en una suave ladera orientada al noreste-sureste, rodeado de una importante vegetación, en la cabecera de un pequeño valle. Tiene origen medieval, en agrupación de viviendas destinadas a la explotación agraria, vinculadas a un núcleo de rango superior, Aracena, de la que se separó en 1631 para convertirse en Villa.
El territorio se ubica en la parte central de la comarca serrana onubense y posee una orografía muy abrupta, manteniendo una diferencia de cotas de 193 m., entre su cota máxima de 841 m. y 648 m. de mínima. Las cotas más altas se localizan en la parte Sur del término municipal, descendiendo conforme más hacia el Norte nos desplazamos; esto origina una pendiente mantenida de Sur a Norte. Hidrológicamente todo el sistema de barrancos discurre de Sur a Norte, siendo de Oeste a Este los siguientes: el Barranco de la Urralera, que separa el término del Castaño del Robledo, el Barranco de la Nogalera y el Barranco de Agua Rubia, que siguiendo la dirección Sur-Norte alcanza el Barranco de Dundún que vierte sus aguas a la ribera de Huelva. Junto a ellos son numerosas las fuentes que aparecen en el término, mostrando el importante manto freático existente en estos terrenos. De ellas destacan la de La Cimbrera, La Higueruela, Valdelahiguera, Monte Blanco y El Casco, entre otras muchas.
Las altitudes más significativas del término son la de 841 m. correspondiente al Puerto del Ciervo y la de 717 m. del núcleo urbano.
En general el trazado se adapta a la topografía produciéndose vías sensiblemente paralelas o perpendiculares a las líneas de nivel, lo que provoca que estas últimas calles tengan una gran pendiente. Su la trama viaria urbana se caracteriza además por varias cuestiones. En primer lugar, la carretera principal de acceso posee un trazado tangente al núcleo urbano y sirve de apoyo para el desarrollo lineal de la edificación, convirtiéndose en parte del viario urbano. En el interior se diferencian dos zonas claramente diferenciadas en su forma urbana: la correspondiente al núcleo originario, con una trama más densa, formada por calles de trazado muy irregular y en la que existen todavía algunos adarves; y la zona de expansión, con calles de mayor anchura y trazado algo más rectilíneo y regular. En esta zona el crecimiento se ha desarrollado en forma de estrella. Existe también cierta diferencia entre calles principales y calles de servicio, que en general son vías de acceso a las traseras de las viviendas y a los corrales. De éstas parte un trazado más confuso surgido de la necesidad de conectarlas con determinadas vías pecuarias y caminos de servidumbre entre parcelas. Estas vías tienen el carácter de caminos semiurbanos y no están dotados de servicios ni pavimentados.
Sus manzanas, generalmente cerradas, responden a una ocupación extensiva y suelen ser irregulares. En el núcleo originario son más densas y de menor tamaño. Por contra las situadas en las zonas de crecimiento son menos densas y de mayor dimensión. De carácter singular son aquellas que se sitúan en los bordes del núcleo o a lo largo del camino de entrada, convirtiéndose en mediadoras entre el espacio urbano y el rural. Las parcelas tienen una lógica correspondencia con las tres situaciones descritas. En la primera suelen ser más irregulares y más pequeñas y su ocupación se acerca bastante al 100%. No obstante, en este núcleo primitivo, existen parcelas de buen tamaño ocupados por la Iglesia y algunas casas de mayor importancia. En la zona de expansión las parcelas adquieren mayor tamaño y la edificación sólo ocupa la parte delantera de la misma, reservándose el fondo como patio, huerto o corral; su ocupación no suele sobrepasar por tanto el 70%. En las manzanas de borde las parcelas son también de buen tamaño y tienen gran parte de su superficie utilizada como corral, huerto o prado para pastos. Este tipo de parcelas se encuentra en ocasiones en el interior del núcleo creándose grandes vacíos urbanos cerrados con cercas de piedra.
La tipología residencial predominante responde a la vivienda unifamiliar entre medianeras, que incorporan en la mayoría de los casos espacios para el uso agrícola o ganadero, especialmente almacenes. La altura de estas edificaciones es de una o dos plantas con soberado, desván o granero en la planta superior. Sólo en casos excepcionales aparecen edificaciones de tres plantas. Suelen tener dos o tres crujías paralelas a la fachada a las que se le agrega un cuerpo de edificación en el patio donde se ubican las dependencias, relativamente recientes, como la cocina y el baño. En el sentido perpendicular a la fachada, las viviendas pueden constar con uno, dos o tres portales, según el ancho de la parcela y la importancia del edificio. En el fondo de la parcela se sitúa el corral y a veces tiene acceso desde la calle trasera, disponiéndose en el mismo piezas complementarias para el uso agrario. Constructivamente, los muros suelen ser de tapial, pudiendo ser de piedra granítica o caliza la planta baja, o simplemente el zócalo. La estructura es de madera y la cubierta, a dos aguas está formada por teja árabe curva. Los paramentos están enfoscados con mortero de cal y encalados. La carpintería es de madera, aunque se está sustituyendo por materiales metálicos. Conviven dos variantes de esta arquitectura una de mayor escala y residencia de las clases más pudientes, y otra más popular que constituye la mayor parte del caserío. En las primeras destacan el mayor tamaño de los huecos, la mayor altura de plantas, el remate de la fachada con pretiles que ocultan las tejas y una composición donde prima la simetría y un cierto ornato. Las segundas responde a una disposición de los huecos más aleatorio y una mínima ornamentación. El predominio del macizo sobre el hueco y los aleros son prácticamente generalizados. Un elemento que se repite con cierta asiduidad es la solana, producida por el retranqueo de la primera crujía en la planta alta, y con cubiertas sostenidas por pilares que sostienen arcos de medio punto o de carpanel (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Fuenteheridos se reconforta con el agua -dos millones de litros al día- que vierten al pilón los caños de una fuente construida en 1903. Se la conoce precisamente con el nombre de fuente de los Doce Caños. Con su caudal perenne y sostenido, contribuye a fecundar huertos y bancales mediante una red de acequias, llamadas "lievas", que conducen el líquido hasta el último surco. Además, es el lugar de nacimiento del río Múrtigas, afluente del Guadiana.
La fuente caudalosa llena de rumores un rincón de la plaza del Coso. Este recinto circular, que concentra el eco de las conversaciones y se postula como centro de los aconteceres diarios, evoca con su nombre el escenario taurino que fue en el pasado. En vez de arena, hoy registra en su centro una desnuda cruz de mármol, erigida en 1792 con materiales procedentes de las canteras locales. Recorriendo unas calles que han sido pavimentadas con piedra caliza y deparan al viajero la sorpresa de encontrar una armoniosa sucesión de casas encaladas, se llega a la iglesia parroquial del Espíritu Santo. Posee una sola nave, construida en el siglo XVI y reconstruida en el XVIII tras el terremoto de Lisboa, y una torre neoclásica de tres cuerpos que luce chapitel con azulejos. Especial interés revestía el retablo de Nuestra Señora de la Fuente, obra anónima sevillana del siglo XVI, que fue sustituido por uno de factura moderna.
En el atrio se alza una pequeña capilla, construida a finales del siglo XVIII, que resguarda una imagen religiosa dibujada por medio de azulejos. Una leyenda explica que fue "destruida por las hordas marxistas en julio de 1936 y reconstruida con prestación personal en abril de 1938".
Una muestra de feracidad etnológica ha brotado recientemente en el pueblo y se refugia en las paredes del Ayuntamiento. Se trata del Museo del Léxico Serrano, que está basado en las investigaciones realizadas por Rodolfo Recio Moya. Con el propósito de rescatar los modismos del habla de la sierra, adorna las paredes de la Casa Consistorial una selva de carteles repletos de vocablos cuyo significado se explica detalladamente y cuya selección se justifica en textos literarios o en locuciones populares.
A la salida de Fuenteheridos por la N-433 hacia Galaroza se encuentra el jardín de Villa Onuba. Es un espacio vegetal y botánico diseñado por el jardinero francés Louis Minoud que, desde finales del siglo XIX, contiene magníficos ejemplares (algunos, exóticos para estas latitudes como los cedros del Atlas o las secuoyas gigantes) que crecen entre senderos y fuentes. El proyecto de jardín botánico fue concebido por Carlos Doetsch, uno de los alemanes que participaron en la construcción de la casa Colón, que compró esta finca y le puso el nombre romano de la capital (Pascual Izquierdo, Un corto viaje a Huelva. Guiarama compact. Anaya Touring. Madrid, 2012).
Fuenteheridos, es uno de los lugares más pintorescos de la serranía en el que sobresale el conjunto de casitas blancas con tejas rojas y su trazado laberíntico, tan característicos del lugar. Interesante es su iglesia, que destaca ampliamente sobre el caserío. Está dedicada al Espíritu Santo, data del siglo XVIII y es de estilo neoclásico (Rafael Arjona. Guía Total, Andalucía. Editorial Anaya Touring. Madrid, 2005).
La fuente se encuentra por debajo del nivel de la calzada; para acceder a ella es necesario descender doce escalones de losetas de mármol. La pila es rectangular y sobre la misma se sitúan los doce caños que dan nombre a la fuente. Los dos grifos situados en los extremos tienen un orificio en la parte superior de los mismos, lo que facilita la recogida del agua en los recipientes. A mano izquierda de la pila nos encontramos con una reja metálica que permite el paso del agua que sale a la superficie en la zona recientemente "rehabilitada".
El edificio tiene un gran interés por diversos motivos; el principal es el valor que tiene la fuente como referente de identificación para el pueblo de Fuenteheridos. Han sido varias las fuentes que han existido en esta localidad, pero cuando un habitante de Fuenteheridos se refiera a "la fuente" es para hablar de la fuente de los doce caños; la Fuente está presente en la denominación del pueblo. La Virgen de la Fuente es la advocación más importante para los "paperos" (imagen muy vinculada simbólicamente a la Reina de los Ángeles de Alájar). Pero además de este valor como referente de identificación el espacio en torno a la fuente (la Plaza del Coso) es un espacio básico de sociabilidad. Junto a la fuente se sitúa el mercado los miércoles; en sus proximidades se encuentran una buena parte de los bares del pueblo. La fuente es un espacio que identifica y con el que se identifican totalmente los habitantes de Fuenteheridos, ideológicamente vinculado a sus orígenes y constantemente presente en los momentos de ocio y de trabajo.
Es este manantial el que abastece de agua a las huertas próximas, el que daba la fuente de energía necesaria a los molinos ya desaparecidos, y en donde las mujeres se juntaban para lavar en el también desaparecido lavadero (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Retablo callejero que cuenta con unas escaleras empedradas, rodeadas por un pequeño muro, que permiten el paso al cuerpo central donde se guarda la imagen del señor de la Verónica.
No podemos precisar los materiales constructivos al estar pintado; los laterales del humilladero, que rodean al mismo son de piedra; los suelos son de empedrado fino.
La construcción que guarda la imagen tiene una ventana enrejada desde donde se puede ver la hornacina de madera, que guarda la imagen.
Destacan la reja, dos faroles, una inscripción y, en la parte superior, una cruz de hierro. El cuerpo central de la construcción está encalado, con partes pintadas en color amarillo. Este humilladero es un punto de unión entre el cementerio y el pueblo. Un punto de unión no solamente en sentido geográfico, ya que se encuentra un poco antes de llegar al cementerio, sino también simbólico: en los entierros la última parada antes de entrar en el cementerio se realiza ante la imagen del Señor de la Verónica (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
La parte más antigua de este templo está constituida por el módulo de la cabecera y el antepresbiterio cuyo orden de semicolumnas toscanas remite a modelos clasicistas de fines del siglo XVI.
En 1768 el arquitecto Pedro de Silva elaboró un informe sobre el estado de la iglesia en el que declara la necesidad de reconstruir el cuerpo de la nave y reparar el resto del edificio. Es indudable que esta reforma se llevó a cabo, lo que se hace patente en la discontinuidad de alturas entre la nave y la cabecera y en el lenguaje de transición al neoclasicismo que hoy se aprecia en la mayor parte del edificio. A tal estilo corresponden sus tres portadas, destacando la del hastial, consistente en un vano adintelado entre pilastras coronado por un frontón y óculo. Se remata el imafronte con un cornisón curvilíneo.
Delante de la fachada, en un lado de la plaza, se encuentra una pequeña capilla abierta, de finales del siglo XVIII. Fue reconstruida en 1938 y actualmente aloja un panel de azulejos de la Santísima Trinidad del siglo XX.
Perdido hace algunas décadas su antiguo retablo mayor de mampostería, hoy sólo queda de interés artístico en el presbiterio la pila bautismal, situada junto a su arco toral de ingreso. Está realizada en mármol blanco y lleva una inscripción que la data en 1692.
En el muro izquierdo se encuentra el retablo de la Virgen de la Fuente, con estípites del segundo tercio del siglo XVIII. La imagen titular es una pequeña escultura de fines del siglo XVI, vinculable con el círculo del escultor Jerónimo Hernández. Completan este retablo un San Joaquín y el grupo de Santa Ana y la Virgen de la segunda mitad del siglo XVIII.
El decorado con estípites, data del segundo tercio del siglo XVIII.
El retablo de San Antonio, del estilo entre el rococó y el neoclásico, data del último cuarto del XVIII. Su imagen titular es de la misma época.
Junto al cancel de ingreso se sitúa una pila de mármol blanco con una inscripción alusiva al misterio de la Anunciación. La Capilla Bautismal posee un retablo-hornacina neoclásico, de imitación de jaspes, fechable hacia 1800, donde se venera una Virgen Dolorosa, de vestir, de la misma época. También se encuentra en este ámbito una imagen de Cristo atado a la columna, del siglo XIX, y un lienzo, exvoto de la Virgen de los Dolores, fechado en 1816. A su salida, en el sotocoro, se conserva una pililla de mármol con veneras fechada en 1775.
Ya en la nave de la derecha, son de interés el grupo de la Trinidad, de finales del siglo XVIII; el retablo de Ánimas, fechable a finales del siglo XVIII y la imagen de San José, de estilo barroco, de finales del siglo XVIII.
La Sacristía conserva, además, de una cajonería de principios del siglo XVIII, un pequeño crucificado de fines del siglo XVI y un conjunto de piezas de platería de indudable interés, en el que destacan la cruz parroquial de la primera mitad del siglo XVII y un ostensorio peruano, de bronce dorado, con decoración cincelada del mismo siglo (Manuel Jesús Carrasco Terriza, Juan Miguel González Gómez, Alberto Oliver Carlos, Alfonso Pleguezuelo Hernández, y José María Sánchez Sánchez. Guía artística de Huelva y su provincia. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2006).
No ha sido posible acceder al interior de la iglesia; para la descripción externa utilizaremos el texto de Suárez Rodríguez: "Ya hace un rato que vemos el campanario más esbelto de la Sierra, en cuyo derredor vuelan veloces golondrinas y se escucha el arrullo de las palomas que anidan en los mechinales. Al pie de la torre se abre una saetera con la decoración más barroca que imaginarse pueda, que en su tiempo sería el marco de una imagen de devoción local".
La portada principal es sobria, pero original. No recordamos haber visto una solución de este tipo, sobre todo en lo que se refiere al frontón trapezoidal, recogido en volutas, y coronado por un óculo de ocho lóbulos. La fachada se culmina con una especie de alero de ladrillo de graciosa ondulación. Frente a la citada portada un curioso templete, donde en un azulejo de Mensaque Rodríguez (Sevilla) se lee: "Destruida por las hordas marxistas en Julio de 1936 y reconstruida con aportación personal en 1938". Pag.54-55.Op.citada.
Los elementos sustentantes son muros de piedra y ladrillo. Como elemento ornamental cabe destacar un retablo callejero, junto a la iglesia (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
La Plaza de Toros consta básicamente de un muro de piedra, que rodea la edificación. Las puertas de acceso conservan el sistema de cierre de madera. La portada de entrada está resaltada sobre el plano del muro.
Destaca un placa conmemorativa sobre la puerta de entrada.
Disponía de varias puertas de acceso, corrales y graderío. Con posterioridad un vecino de la localidad, Lorenzo Marques, como propietario de la plaza, vendió los corrales a otro vecino. En la década de los 80 los herederos de Lorenzo Marques autorizaron al Ayuntamiento para arreglar la plaza y que pudiesen celebrarse en ella espectáculo taurinos (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Si quieres, por Amor al Arte, déjame ExplicArte la provincia de Huelva, déjame ExplicArte los principales monumentos (Fuente de los Doce Caños; Humilladero de Nuestro Señor de la Verónica; Iglesia del Espíritu Santo; y Plaza de Toros) de la localidad de Fuenteheridos, en la provincia de Huelva. Sólo tienes que contactar con nosotros en Contacto, y a disfrutar de la provincia onubense.
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