Datos del Municipio
Situación: Marchena está situada en un hermoso valle de La Campiña, entre dos colinas, a 132 m. de altitud.
Coordenadas GPS: x = -5.415861643 - y = 37.32984555
Extensión: 377 km2
Distancia a Sevilla: 59,5
Altitud: 132 m
Entorno: Municipio enclavado en un fértil valle regado por el río Corbonés.
Datos del Ayuntamiento
Dirección: Plaza del Ayuntamiento, 1, CP. 41620
Teléfono: 955 32 10 10
Fax: 955 32 10 11
Email: ayuntamiento@marchena.org
Web: www.marchena.es
Oficinas de Turismo
Oficina Municipal de Turismo: de lunes a viernes de 9.30 a 14.30h. Sábados y domingos de 10.00 a 14.00h. En agosto los domingos estará cerrado.
Dirección: c/ Las Torres, 48, CP. 41620
Teléfono: 955 32 10 10 ext. 175 ó 174
Fax: 954 32 10 11
Email: turismo@marchena.org
Información turística
Las huellas más antiguas corresponden a la edad de bronce. Marchena es conocida por su importante conjunto monumental (declarada Conjunto Histórico-Artístico) donde destacan la Puerta de Sevilla y la Iglesia de San Juan Bautista. Dentro de la Iglesia no te pierdas el Museo de Zurbarán. Cabe destacar también la Plaza Ducal, el Convento de la Purísima Concepción, con sus típicos dulces, y las casas-palacio. Completa la visita con un paseo por la Ronda de la Alcazaba.
La Semana Santa está declarada de Interés Turístico de Andalucía.
No te puedes perder... sus iglesias (Diputación Provincial de Sevilla).
Población situada en el llano que configura la comarca de la Campiña. Su término, de gran riqueza agrícola, está regado por el río Carbones y por varios arroyos, entre los que destaca el Salado. Los restos arqueológicos más antiguos que se han encontrado en su término corresponden a la Edad del Bronce, habiendo aparecido en las proximidades de la localidad una importante necrópolis con cerámica campaniforme. En el yacimiento denominado Montemolín se han descubierto restos de un asentamiento del Bronce final, siendo muy numerosos los puntos en que se encuentran vestigios correspondientes a la época romana. Entre éstos cabe citar los yacimientos de Palmarete, Santa Eulalia, el Toril, Hacienda de Vistalegre y Cortijo de Porcún, habiéndose también hallado en estos dos últimos piezas tardorromanas y visigodas.
Aún conserva Marchena buena parte del circuito de murallas que rodeaba el primitivo núcleo de población. En algunos casos los muros y torreones defensivos aparecen embutidos en construcciones modernas y en otras ocasiones han servido de vivienda o de base a nuevos edificios. El perímetro amurallado ocupa una amplia superficie y servía para defender un castillo o fortaleza emplazado en el lugar más elevado del recinto. Atendiendo a los tipos de fábrica empleados, se trata de una construcción islámica con posteriores reformas y ampliaciones cristianas, siendo la más importante la ejecutada durante la primera mitad del siglo XV por deseo de D. Pedro Ponce de León. Islámicas, fechables en el siglo XII, son las labores realizadas en tapial y en mampostería de piedra alternando con lajas, así como los torreones cuadrados y ochavados y los arcos de herradura encuadrados por alfiz de las puertas, una de las cuales presenta acceso en recodo. También corresponde a este momento la línea de barbacana situada a cierta distancia de la muralla, muy perdida en algunos sectores. Cristianos, del siglo XV, son los muros de mampostería de piedra concertada, los torreones circulares y algunos recrecimientos de las murallas.
Un sector urbano digno de destacarse, aunque desgraciadamente muy deteriorado, es el constituido por la plaza ducal y sus aledaños. Aquélla tiene planta rectangular cerrada y se accede a la misma por cuatro grandes arcos situados en los ángulos. Su construcción, llevada a cabo entre 1701 y 1705, estuvo a cargo del arquitecto Alonso Moreno. Los frentes menores lo ocuparon el Ayuntamiento y el palacio de los Duques de Arcos, si bien éste ha desaparecido totalmente y se ha construido en su lugar un bloque de viviendas. El edificio de las Antiguas Casas Capitulares, construido entre 1709 y 1713 por el citado Alonso Moreno, posee dos plantas y presenta una portada con columnas toscanas y balcón central rematado en escudo. Los lados mayores de la plaza están ocupados por viviendas de cuatro plantas con balcones corridos y algunos miradores. En las calles que dan entrada a la plaza existen diversas construcciones, también del siglo XVIII, cuyas fachadas, aunque semejantes a las anteriormente descritas, nunca llegan a alcanzar sus dimensiones.
Fuera ya de este conjunto hay que destacar diversas construcciones realizadas entre los siglos XVI y XVIII, siendo las de este último las más abundantes. En primer lugar hay que citar la Casa de Fábrica, situada junto a la parroquia de San Juan, que presenta dos plantas y una portada de ladrillo entre pilastras rematadas por balcones. Fue construida entre 1771 y 1773 siguiendo las trazas de Ambrosio de Figueroa. La casa frontera a la mencionada parroquia posee una portada con vano adintelado entre columnas toscanas y balcón central entre pilastras, pudiendo fecharse entre 1785 y 1795. La antigua Cilla del Cabildo fue construida con planos elaborados por José Álvarez, quien levantó tres crujías en "U", para enlazar con el edificio del siglo XVII preexistente. Posee dos plantas, articulándose su fachada en cinco módulos desiguales mediante un orden gigante de pilastras toscanas. En su portada figura un panel de azulejos con el escudo del cabildo de la catedral sevillana, fechado en 1773, aunque es posible que las obras se prolongaran durante algún tiempo. En la calle de la Cilla se encuentra el Nuevo Pósito del Concejo, levantado en 1732 por los maestros Bartolomé Navarro y Lorenzo Pérez. Otro edificio de interés es el antiguo granero de los marqueses de Cartagena, ubicado en la calle Las Torres número 28, que fue construido entre 1779 y 1782. La vivienda que ocupa el número 4 de la calle Mesones, fechada en 1801, tiene fachada articulada por medio de pilastras y portada central entre parejas de columnas y un gran balcón corrido en el piso alto. Otra casa interesante es la situada en el número 16 de la calle San Pedro, con balcón en ángulo y portada rematada en mirador cobijado bajo un medio punto de paramento avitolado, que tiene pilastras flanqueando la puerta y un balcón sobre ella. Su patio, de planta cuadrada, se encuentra desplazado respecto al eje de la portada, situándose en una de sus galerías una escalera de dos tiros, cuya embocadura presenta arquerías sobre columnas. En el número 14 de la misma calle San Pedro se localiza una casa levantada hacia 1790, cuya portada adintelada se encuadra por columnas y se remata por un balcón. Destaca en ella su ondulada cornisa. La casa número 12 de la calle Santa Clara, con portada de ladrillo avitolado, está fechada en 1796 y tiene curiosos tejaroces sobre las ventanas (Alfredo J. Morales, María Jesús Sanz, Juan Miguel Serrera y Enrique Valdivieso. Guía artística de Sevilla y su provincia. Tomo II. Diputación Provincial y Fundación José Manuel Lara. Sevilla, 2004).
La población de Marchena se ubica sobre un promontorio de escasa altura mostrando su perfil de ciudad histórica insertada en un amplio paisaje de la campiña sevillana. El desarrollo morfológico de esta localidad inicia su proceso en la cota más alta del promontorio, lugar en el que se ubica la cerca amurallada, los restos del alcázar y posterior palacio y la iglesia de Santa María de la Mota, uno de los referentes de mayor significación en la apreciación paisajística del conjunto por la inexcusable presencia de su torre campanario.
La parte más antigua del Núcleo se sitúa en una elevación del terreno (la Mota, 140 metros), en una zona de discretas ondulaciones. Núcleo Urbano en una suave ladera orientada al norte-noroeste. Sus altitudes más significativas son:
Castillo (Iglesia), 148,5 m.; Estación F.C., 107 m.; Iglesia de Santa Clara, 131,0 m.
Antigua Medina Islámica (actual Barrio de San Juan) con forma aproximadamente elíptica.
Trama urbana con un mediano desarrollo viario. Las manzanas son de tamaños variados, irregulares. En algunas zonas aparecen grandes manzanas de edificación poco permeables. Los tipos viarios y espaciales, propios de la Ciudad Islámica, tienen su presencia como producto del trazado orgánico: adarves, plazuelas y barreduelas. Arrabales Históricos (Barrios de San Miguel y San Sebastián), con trama viaria irregular y manzanas grandes, algunas de ellas bastante alargadas, siguiendo las directrices de crecimiento que constituyen los caminos históricos.
Morfológicamente se distingue por una parte un recinto amurallado con entramado irregular correspondiente al núcleo islámico. Por otra parte tenemos la zona de expansión cristiana, con un entramado completamente distinto al anterior, expresión típica de la morfología medieval de manzanas con grandes dimensiones formadas por parcelas muy regulares, alargadas y con disposición perimetral, quedando en el centro un gran vacío urbano.
Casa popular con presencia de casa patio, edificios singulares y casas-palacio de dos plantas.
Tipológicamente el caserío histórico es barroco, en la zona intramuros se hallan las principales casas señoriales y palaciegas, y salvo excepciones en los arrabales exteriores se asienta un extendido caserío barroco popular de viviendas adosadas y de dos plantas (Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía).
Marchena, villa monumental del legado andalusí
Marchena está a 63 kilómetros de Sevilla, situada en el Valle del Guadalquivir dentro de la comarca de La Campiña. Sus campos llanos dedicados al cultivo del olivar y los cereales están regados por el río Corbones.
Las huellas más antiguas se corresponden a la edad de bronce, destacando el “yacimiento de Montemolín”. En cuanto al asentamiento romano, varios son los posibles nombres de este pueblo: 'Castra' 'Genuina', 'Alpe' y 'Colonia Marcia', en honor de Marciana, hermana de Trajano. Su nombre actual proviene del adoptado durante la invasión musulmana, “Marssen-ah”.
Visitar Marchena es viajar al pasado de la impresionante Al-Andalus. Entre campos llanos de olivares y cereales se alza esta antigua ciudad almohade, situada en pleno corazón de La Campiña sevillana. A lo lejos, divisarás la torre de su Iglesia de Santa María de la Mota, levantada sobre la mezquita que albergaba el alcázar musulmán. Aún conserva gran parte de su recinto amurallado, destacando el Arco de la Rosa, actual seña de identidad de la población.
Pasea por sus calles señoriales y disfruta de un patrimonio histórico de valor incalculable. En esta localidad lucen sus bellas casas moriscas, enormes mansiones y espléndidas iglesias, como la Parroquia San Juan Bautista, declarada Bien de Interés Cultural en 1931.
Marchena también es cuna del flamenco, conocida internacionalmente por Pepe Marchena, el padre de ‘las colombianas’. Además el arte se derrocha entre su gente, famosa por el cante único que realza su Semana Santa, las saetas moleras.
Otro de los tesoros de este pueblo es la gastronomía, contagiada por su tradición andalusí en platos como la sangre encebollada con tomate o las espinacas con garbanzos. Pero si hay un producto autóctono que debes probar, ese es el mollete marchenero. Pégate un buen desayuno con este pan tradicional de Marchena, que acompañado del aceite de oliva de la tierra se convierte en toda una delicia para el paladar.
Desde Sevilla, si vas en coche, puedes acceder a Marchena a través de la A-92 por la salida 49B, a la altura de Paradas.
Marchena cuenta con estación de tren por lo que puedes llegar mediante la línea de ferrocarril Sevilla-Málaga-Granada-Almería. Si eliges el autobús para viajar, la empresa Autocares Valenzuela te ofrece diferentes salidas diarias desde la Estación del Prado de San Sebastián de la capital sevillana.
Camina por sus calles y descubre el valor de su patrimonio histórico. Pero si no te apetece andar mucho, tienes el autobús urbano para moverte por toda la localidad. También puedes hacer senderismo o cicloturismo a través del paraje natural de este bello municipio de La Campiña.
Descubre el pasado andalusí de Marchena en una ruta guiada por el barrio de la Mota y por su muralla.
Pasea por los jardines del Parque Isidro Arcenegui y contempla el monumento al cantaor flamenco, Pepe Marchena.
Conoce las leyendas de Marchena, como la que dio nombre al Arco de la Rosa.
Desayuna el rico mollete marchenero en cualquiera de los bares del pueblo.
Si eres goloso, te encantarán las tortas de hoja elaboradas artesanalmente por las monjas del Convento de San Andrés.
Vive su Semana Santa y siente el arte de las saetas moleras en la Puerta del Tiro.
¿Te gusta el arte barroco? En la Iglesia de San Juan Bautista tienes nueve obras del gran pintor del Siglo de Oro, Francisco Zurbarán.
El centro histórico de Marchena guarda un gran valor patrimonial. Es de los pocos municipios de la provincia que conserva su arquitectura árabe. El punto de partida para visitar esta relevante ciudad del Al-Andalus es el Arco de la Rosa, el emblema del pueblo. Se trata de la Puerta de Sevilla de la muralla que encierra una hermosa leyenda sobre el romance de una princesa mora y un cristiano.
Para conocer mejor su historia almohade puedes hacer una ruta guiada por su recinto amurallado, un servicio ofrecido por su Oficina de Turismo. En esta ruta pasarás por la Puerta del Tiro que unía la ciudad medieval con el alcázar defensivo. Es uno de los rincones más pintorescos del pueblo. Aquí en Semana Santa se cantan las famosas saetas moleras de Marchena. A pocos metros te encontrarás con el templo más antiguo, la Iglesia de Santa María de la Mota. Anteriormente fue una mezquita dentro del recinto del castillo árabe.
Dirígete ahora hacia la Plaza Marcelo Spínola y contempla la belleza del barrio de San Juan, con sus casas palaciegas y edificios con la cruz de la Orden de Malta. En esta plazuela se ubica la Iglesia de San Juan Bautista, cuyo interior alberga nueve obras pictóricas del gran artista barroco, Francisco Zurbarán. Toda una joya para esta localidad.
Si te apetece reponer fuerzas, pasea hasta la Plaza de San Andrés y entra en el convento que allí se ubica. Las monjas mercedarias elaboran artesanalmente la torta de hoja, un exquisito dulce marchenero. No dudes en probarlo, te encantará. Continúa tu recorrido por las calles históricas descubriendo los numerosos edificios religiosos y mansiones nobiliarias de esta villa señorial.
Termina tu ruta en el Parque Isidro Arcenegui, donde se erige la escultura al cantaor y creador de las colombianas, Pepe Marchena. Descansa un poco en sus preciosos jardines y finaliza degustando la exquisita gastronomía de Marchena en alguno de sus bares o restaurantes (Turismo de la Provincia de Sevilla).
Si quieres, por Amor al Arte, déjame ExplicArte la provincia de Sevilla, déjame ExplicArte la localidad de Marchena, en la provincia de Sevilla. Sólo tienes que contactar con nosotros en Contacto, y a disfrutar de la provincia sevillana.
Más sobre la provincia de Sevilla, en ExplicArte Sevilla.
La localidad de Marchena, al detalle:
Angostillo
Arroyo Carretero
Arroyo Hondo de la Rambla
Arroyo Pedro López
La Atalauya
Atalaya Alta
Casa Fábrica
Casa Palacio en calle Casa San Juan
Casa Palacio en calle Mesones
- Casa Palacio Santa Teresa
La Cilla del Cabildo
- Convento de la Concepción
- Convento de Santa Clara
- Convento de Santa Isabel
Cortijo Ojuelo
- Iglesia de San Agustín
- Iglesia Parroquial de San Juan Bautista
- Iglesia Parroquial de San Miguel
- Iglesia Parroquial de San Sebastián
- Iglesia de la Veracruz
Molino de los Miradores
Molino Penas Tristes
Palacio Ducal - Castillo de la Mota
Plaza Ducal - Casas Consistoriales
Puerta de CarmonaPuerta del Tiro
La Ronda de la Alcazaba
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